Por Mauricio Torres Peña[1]
Varios estudios paleoantropológicos que analizaban restos óseos de humanos pertenecientes al paleolítico encontraron indicios de enfermedades degenerativas, como osteoporosis y artrosis, en algunos esqueletos. Estas patologías son casi exclusivas de las edades avanzadas, por lo tanto, estos hallazgos comprobaban que varios cazadores-recolectores podían tener una elevada esperanza de vida, lo que implica necesariamente la existencia de esfuerzos por parte de los nómadas para proporcionar apoyo y cuidados básicos a sus miembros más ancianos para mantenerlos vivos el mayor tiempo posible. ¿Qué explica esta conducta en estas poblaciones? La respuesta radica en la necesidad de supervivencia, la mayoría de los ancianos representaban fuentes fidedignas de información relevante.Leer más