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Noche de fuego: Visión femenina de tierras secuestradas

Por Sergio E. Cerecedo

 

Tatiana Huezo (2021)

Para una persona seguidora de los últimos tiempos del cine mexicano —y latinoamericano— que tiene como eje temático las luchas sociales de los pueblos más desfavorecidos, la temática puede sonar trillada y recientemente explorada en películas como “Cómprame un revolver” (Julio Hernández Cordón), “Sanctorum” y “La Maldad”(Joshua Gil), entre otras. Pero me permito recordar que cuando hay en las artes y los medios algo llamado zeitgeist —el espíritu de la época—, más allá de modas y patrones, es porque la gente que realiza cine, que expresa y comunica a través de los medios encuentra una importancia fundamental en recrear en argumentos ficcionados hechos y personajes de la vida real que les parecen imposibles de ignorar, y de vez en cuando, porque tiene una manera distinta de contarlo que complementa a las que ya existen.

 

La película que hoy nos ocupa —además de haberse proyectado en Cannes y otros festivales grandes y, por fortuna, haberse mantenido bastante tiempo en cartelera—, cuenta con todos los elementos antes mencionados, brinda una visión inteligente, emotiva, sin necesidad de sobresaltos acerca de crecer, tomar decisiones y las relaciones filiales en contextos difíciles.

 

Basada en el libro Prayers from the stolen de Jennifer Clement, la película sigue los hechos en un lugar indeterminado de Guerrero, Oaxaca o Veracruz, que sin duda tiene un dejo intencionado de la Centroamérica que la directora lleva en sus orígenes, al ser originaria de El Salvador, y en ese sabor personal que tieneLeer más

Arte y SIDA en Nueva York de José Luis Plaza Chillón

El arte en el epicentro del SIDA gay

Por Diego Medina

Dedicado a Luis Blanco quien generosamente me ha facilitado este material

 

Publicado en 2017, este libro de José Luis Plaza Chillón nos ofrece un análisis iconográfico de la obra del texano Delmas Howe, artístico plástico influenciado por la mitología griega, la masculinidad texana, la epidemia del SIDA en los años ochenta y su visión sobre los grupos marginados del vecino del norte, en particular migrantes y homosexuales. Sin embargo, el libro no se limita a hacer un trabajo monográfico, Plaza Chillón hace un breve repaso sobre los tópicos del arte gay, entre los que incluye una breve historia de la literatura gay y la literatura sobre el cuerpo enfermo.

 

El arte gay se ve transformado por el SIDA, ya que la epidemia le dio un giro de 180 grados al estilo de vida de la comunidad gay en Estados Unidos (y el mundo) que venía de una época de liberación sexual. Estos cambios se notan en la literatura, la fotografía y la pintura, si bien nuestro autor centra el discurso en la obra del texano, el libro ofrece un aparato crítico de primer nivel que nos ayuda a contrastar la información y profundizar en lo expuesto. En este sentido, el libro de Plaza Chillón eLeer más

“Indulgencia”

Pastel de calabaza inspirado en la novela El bebé de Rosemary de Iran Levy

 

Por Diana Peña Castañeda[1]

 

“El bebé pateaba como un demonio”

 

Tiene ojos amarillos, casi dorados, cuencas en forma triangular, pupilas verticales. Su mirada infunde miedo, eso le hace reír. Observa vigilante los abismos de las almas golondrinas que habitan el mundo. Espera el minuto para azotarlas con su trueno devorador hasta dejarlas sumergidas en el mar de sus propias suciedades. Ahora, habita la atmósfera claustrofóbica de la casa Bramford. Sus vecinos son sus devotos.

 

Desde el centelleo de sus fogones como si se tratase de una liturgia sagrada dispone los ingredientes, afila presurosamente los cuchillos, rectifica sabores, se relame los dedos. Un vals estridente de medianoche avisa que la mesa está servida. Abre las puertas del gran salón, la luz de las lámparas ondea, los comensales se sientan. Cada cosa en su lugar. Su risa se retuerce entre los hilos del mantel. El Diablo no solo está vivo, es un exquisito gourmet y Rosemary, metáfora de la inocencia, su invitada especial.

Rosemary es una católica no practicante, solo quiere una familia. Guy, protestante, actor de teatro, busca desesperadamente un papel principal en Hollywood; para conseguirlo, hará lo que sea necesario. Por eso un apartamento en el esplendoroso edificio de estilo gótico, el Bramford.

 

Mientras ella espera en una casa de té a que su esposo traiga la respuesta del arrendador, pedirá bocadillos de pollo, su plato preferido. El pollo es un animal que reconforta, tiene poderes curativos. También es un animal muy frágil, puede morir de un ataque al corazón. El pollo, simboliza la inocencia como Rosemary. Más adelante, del pollo, lo único que ella comerá será su corazón crudo, ¿Acaso la muerte de esa inocencia?

 

Como señal de su presencia, el Diablo ofrecerá un bloody mary.  Pero ¡Si es un coctel de jugo de tomates, limón, vodka, picante! Sí, se dice que inspirado en la reina María I de Inglaterra, la sanguinaria, famosa por perseguir a los no practicantes del catolicismo. En cada sorbito que ella hLeer más